Desde sus primeros encuentros el arte ha brindado a Pablo la libertad de comunicar la belleza de su mundo interior, de expresar su sensibilidad y su sentido de lo estético. Sus lazos con el arte empezaron a formarse a muy temprana edad cuando Luisito y el asistieron a un pequeño taller artístico para niños. De allí en adelante, procurando estimular en ambos la creatividad, los inscribimos en los planes vacacionales del Centro de Arte Lia Bermudez, en el centro de la ciudad, donde ambos daban rienda suelta a sus procesos creativos.
A los 10 años, con el objetivo de que continuara explorando ese mundo, intentamos inscribir a Pablo en los cursos libres de pintura en la Escuela Neptali Rincon, allí nos encontramos con un NO, debido a que la institución no contaba con personal docente preparados para atender niños especiales – Cabe destacar que en el año 2008, cuando ya Pablo había ganado premios como artista, recibió un reconocimiento de esa institución- . De cualquier modo, ese rechazo nos guió hacia la escuela Julio Arraga quienes abrieron sus puertas a Pablo y al inicio del siguiente programa escolar estaba participando en el curso de dibujo infantil, tres años después, los participantes mostraron sus trabajos en una exposición en la misma escuela. Los primeros trabajos de Pablo datan de esa época, un lienzo con el nombre la ciudad, donde plasma un sector de Maracaibo y destaca el edificio donde vivíamos para ese momento, la acuarela “Batería de Maná”, la cual representa su identificación con la batería y su grupo musical preferido, Pablo culminó el programa de pintura infantil y se gradúa en la XXXIV Promoción General Francisco de Miranda año 2000. Al terminar esta fase siguió tomando clases y preparándose en diversas técnicas de pintura, según la programación de la escuela, al finalizar consigue graduarse con la promoción “12 de Octubre Día de la Resistencia Indígena ” luego de haber cumplido con los requisitos de ley en la especialidad Dibujo y Pintura, año 2003.
En esa etapa produjo varias obras entre ellas “Bodegón”, un óleo de colores vivos cuyo tema central son una variedad de objetos inanimados sobre una superficie, “La Familia” un óleo que representa el retrato de una madre, un padre y su bebé en brazos, y en el cual los sentimientos y las sombras juegan un papel fundamental. Este último es un regalo extra especial que atesoro, Pablo me lo obsequió un día de las Madres
Fueron las obras que produjo con la técnica del grabado los que han sido reconocidas por la crítica. Su obra denominada “La Careta”, fue premiada en el 5to Salón de pintura Emerio Darío Lunar de la Universidad del Zulia, Dirección de Cultura. Participa en el XXXI Salón de pintura del Colegio de Médicos del Estado Zulia y gana el tercer lugar con su obra El Ojo Mágico.
En el año 2007 aparece en la edición No.10 de la Revista Cita magazine un reportaje de Pablo como artista, denominada “Plastica Retrospectiva ” en la cual se señala como Pablo es “prueba fehaciente de que en el mundo no hay límites ni fronteras y menos aún obstáculos para las personas que quieren salir adelante en la vida….. Si pudiese decirlo de alguna forma, Pablo a burlado el Síndrome de Down, salvo una leve deficiencia al hablar, es un joven como cualquier otro, inclusive se podría decir que mucho más agudo y maduro que muchos chicos de su edad…. Y es que el Ojo Mágico, es un cuadro que hipnotiza a cualquiera, en primer plano y bordeando los límites del espacio un gran ojo, su iris, su pupila fija y en zoom back espiral, pero esta vez utilizando el tiempo como protagonista, recrea dentro diversas situaciones hasta detallarse un rostro. El original de este grabado descansa en la distinguida Galería Urdaneta…. no puedo dejar de mencionar entre sus obras una que dedica de manera especial a Andreina Acurero, persona de su afecto, la iluminación de esta obra es particularmente una joya de la plástica, donde su trazo casi impresionista se perfila como protagonista. Si conoce de milagros, de genialidades, con todas las de la ley Pablo es uno. Baterista, nadador y exitoso artista plástico y quién sabe cuánto más esconde, pero hay algo que le sobra a Pablito y eso es disciplina y constancia. Adelante!”
En el Año 2008 recibió Botón Honor al amerita del Estado Zulia Dia del Artista Plástico y participa en la exposición de pintura en los espacios de esta institución. A partir del 2014 regresa a la pintura después de sus problemas de salud (crisis tiroidea) con el profesor y pintor Mario Colina, 3 horas al día cada sábados en los espacios del teatro Bellas Artes y del antiguo local de la Alianza Francesa, alimentando su pasión por la pintura continúa mostrando sus obras como la serie rostros. En los últimos años se volcó hacia el dibujo como expresión artística en blanco y negro y continúa su interés por los rostros donde tiene series completas y su regalo preferido a personas de su total estima.
En el 2019 participa en el taller técnicas de estampados en el Museo de Arte Contemporáneo del Zulia con el conocido Maestro Hernán Alvarado, así Pablito continúa enriqueciendo su mundo y descubriendo posibilidades de expresión artística. Mientras que en nuestro hogar así como en el de la familia y amigos cuelgan sus obras que nos llenan de orgullo y nos dan una visión de su fascinante mundo interior.
sin duda inspirador y un ejemplo de que todo lo hermoso y maravilloso es posible, E un ragazzo bravissimo!
Si lo es!! gracias 🙂